Hotel Las Cruces

Belmonte › Belmonte de Miranda › Principado de Asturias

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Palabras clave

Hotel Las Cruces | Dónde dormir | Alojamientos turísticos | Hoteles | Belmonte | Belmonte de Miranda | Comarca del Camín Real de la Mesa | Occidente de Asturias | Montaña de Asturias | Asturias | Principado de Asturias | España | Europa.

Características

Categoría: 3 estrellas

Plazas fijas: 34 • Plazas totales: 34

Habitaciones: 20

Descripción

Situado en el incomparable entorno natural del concejo o municipio de Belmonte de Miranda, el moderno HOTEL LAS CRUCES, de ambiente familiar con vistas al río Pigüeña, se encuentra cercano al Parque Nacional de Somiedo, donde se pueden observar aún ejemplares de oso pardo y otras especies en peligro de extinción, y al salmonero río Narcea.

Les invitamos a conocer nuestro concejo, nuestro entorno natural, y por supuesto, nuestro hotel.

El hotel

El Hotel Las Cruces es un moderno edificio en pleno centro de Belmonte de Miranda (capital del concejo), junto al Ayuntamiento.

Equipado con 20 habitaciones, posee amplias zonas comunes, servicio de habitaciones, y una amplia cafetería en la que podrán disfrutar de salón TV, juegos de mesa, etc.

Las habitaciones de nuestro hotel están perfectamente equipadas para que Vd. y los suyos disfruten de su estancia.

Todas las habitaciones son exteriores, muy luminosas y están equipadas con baño completo, TV, teléfono, conexiones a Internet de Banda Ancha (ADSL) caja fuerte, minibar, hijo musical, zona de estar y cafetería. Al lado de la piscina municipal.

Entre nuestras habitaciones destacamos nuestras 2 suites, que se distinguen del resto por sus espacios aún más amplios, divididas en 2 zonas, una zona de estar con escritorio, sofá, etc... y otra zona que sería equivalente en espacio y equipamiento a una habitación completa.

También disponemos de garaje para nuestros clientes.

Les invitamos a conocer nuestro hotel, rodeado de un ambiente tranquilo, ríos cristalinos y fauna autóctona en plena naturaleza y acompañado de la mejor gastronomía típica de la zona.

Actividades al aire libre

  • Por valles, desfiladeros, montañas y praderas, Belmonte de Miranda ofrece a los amantes de la naturaleza un interesante abanico de posibilidades.
  • La Calzada Romana o Camín Real del Puerto de La Calzada son rutas muy recomendables, al igual que la Ruta Vaqueira, hermoso itinerario a través del pueblos habitados por vaqueiros por la Sierra de Begega. Los aficionados al montañismo tienen su oportunidad con la subida al pico Peña Manteca.

Área Recreativa de Vigonzález

  • En la parroquia de Leiguarda disfrutamos de un área recreativa que ofrece un gran número de centenarios castaños para descansar del camino de las rutas. Está en la ribera del río Pigüeña.

Caza y pesca

  • La caza y la pesca son uno de los atractivos del concejo más interesantes para los aficionados puesto que Belmonte tiene en su fauna especies que, tanto en caza (jabalí, corzo, perdices) como en pesca (salmón en el Narcea y truchas en el Pigüeña), pueden considerarse reinas.

Entorno

El concejo integra, junto al de Somiedo, la comarca de Pigueña. Belmonte de Miranda está limitado al norte con Salas, al este con Grado, al sur con Somiedo y Teverga y al oeste con Tineo. Los principales núcleos de población por orden de habitantes son: Belmonte (su capital), Selviella, Villaverde, San Bartolóme, Boinas, Castañedo y San Cristóbal.

La belleza de su ecosistema ha obligado a las autoridades a ampliar los límites del Parque Natural de Somiedo a las tierras limítrofes del concejo de Belmonte. Su secular aislamiento permitió que llegara hasta nosotros con una importante masa arbórea, en la que dominan las especies forestales autóctonas: bosques de robles, de espinares, de castaños, etc. Por encima de los 800 metros abundan las zarzas, helechos, habitando diversas alimañas como lobos, zorros, tejones, corzos, jabalíes y algún oso.

Dentro de su fauna piscícola, el rey es el salmón en los numerosos cotos que hay en el Narcea. En el río Pigueña y sus afluentes sigue habiendo salmones, pero la especie predominante es la trucha. Esta recuperación ambiental es debida a toda la política de repoblación de los ríos del concejo.

Son escasas las noticias sobre los primeros pobladores que habitaron estas tierras, pero se tiene constancia de la existencia de una necrópolis en Balbona, aunque no se encontraron restos de ajuares. El hallazgo más importante es la aparición de un ídolo en Llamos, aunque sin contexto arqueológico, y es difícil su datación, únicamente comparándolos con otros similares que se podrían datar en la Edad de Bronce.

Su cultura castreña tiene pocos restos, identificándose en el pico Cervera un castro que quizá sea una antigua torre romana. Sí hay muchos restos romanos, tal vez debido a toda la explotación aurífera llevada a cabo en esta zona. Hay una calzada romana que unía Asturias con la Meseta: fue anteriormente una vía natural, ya utilizada por los astures. Esta vía fue él más importante cruce de culturas, por ahí pasaron: centurias romanas, huestes árabes, peregrinación jacobea, etc.

Resulta complicado fechar históricamente el nombre de Miranda al de Belmonte; apareció en la Edad Media como un territorio que más o menos podría estar en esta zona. La historia de este concejo está unida a la construcción de un monasterio, La Villa Lapideum, fundado por la reina Velasquita, esposa del rey Bermudo II de León, que reunió en una sola propiedad varias dispersas. Bermudo III permutó esta propiedad con los condes Pelayo Froilaz e Idontio Ordoniz por otra de éstos que estaba en Galicia. Dichos condes fundaron un monasterio, pero sus descendientes disgregaron el patrimonio, que más tarde sus herederos lo aumentarían y simultáneamente el rey Alfonso VII lo puso bajo su protección, acrecentando aún más su patrimonio y consolidándolo como señorío territorial y jurisdiccional. De este monasterio de Lapedo no queda piedra alguna. Determinó la historia del concejo y su predominio sobre el resto de monasterios de la zona.

En los actuales territorios estaban las tierras de Miranda Alta y Miranda Baja y, entre ambos, el coto abacial de Santa María de Lapedo; luego había dos jurisdicciones, la primera con capital en Selviella y el segundo el de Lapedo, donde había un pequeño poblado que se llamaba Belmonte. Las gentes que estaban en las tierras monásticas vivían bajo una férrea jurisdicción de los abades, mientras que los de Miranda, tenían representantes propios en la Junta General del Principado. En 1827 el coto pasa a ser por decreto agregado al concejo de Miranda, al ser la villa de Belmonte más importante y estar mejor situada, estableciéndose en ella la cabeza del partido judicial.

La historia de este concejo permanece unida al monasterio hasta el siglo XIX, monopolizando los monjes no sólo tierras sino también sojuzgando a sus habitantes, dándose el caso de que sus colonos no podían contraer matrimonio sin el permiso de los abades. Esta férrea actitud se acabó, con el decreto de la Desamortización de Mendizábal, que hizo que la revancha de los campesinos fuera rápida y se apresuraran a no dejar piedra sobre piedra del convento de Lapedo.

En aquellas circunstancias muy pocas familias eran libres y las que lo eran pertenecían a la nobleza secundaria. El mayor colectivo lo constituían los vaqueiros de alzada, a quienes los propietarios cedían la explotación de pastos y rebaños, que fueron ascendiendo progresivamente a la condición de propietarios de rebaños, más que de tierras, sobre todo porque los pastos adquirieron propiedad comunal, al subir todos a los mismos pastos de la montaña.

La historia de este concejo siempre ha sido ganadera, si se destaca como paréntesis la construcción por Hidroeléctrica del Cantábrico del Salto de Miranda, que dio al concejo una época de bonanza, recordada como «la época de las obras», ya que fue tal la cantidad de puestos de trabajo, más de 1.800, que llegaron de todas partes de Asturias.

Su historia artística está unida hasta el siglo XIX al monasterio cisterciense de Santa María de Lapedo, el cual fue enriquecido a lo largo de los siglos por monarcas y particulares, siendo uno de los más poderosos de todo el Principado de Asturias. Con la Desamortización de Mendizábal, su estructura fue destrozada rápidamente, quizás por el odio de la gente del lugar, debido a la opresión de los monjes sobre la zona. Del monasterio sólo quedan tres leones. El pintor F. J. Parcerisa realizó una litografía del claustro, que era espacioso y de orden toscano, con pórtico bajo, galería alta y abierto a todos los rayos del sol. El ayuntamiento de Belmonte de Miranda utilizó los materiales procedentes del monasterio para construir obras civiles.

La villa de Belmonte celebra la fiesta de San Antonio, o el día de la Gira, que es último domingo de agosto. Otras fiestas del concejo que se destacan son: la de San Fructuoso, que se celebra en Agüero el mes de julio; la de San Julián, el 7 de enero en la misma localidad; la romería campestre de La Corredoria, el primer domingo de septiembre, y los Dolores, el tercer fin de semana de septiembre.

La gastronomía, como en el resto de Asturias, es rica y variada, sobre todo en productos cárnicos y sus derivados. Una de las especialidades más características es el sollumbu a la manteiga. También constituye parte de ella los platos condimentados con carnes procedentes de la abundante caza (corzos, rebecos, jabalíes) y también los de la pesca (truchas, salmones y reos). Su repostería casera es muy variada y bastante similar a la de sus vecinos concejos: natillas, flanes, tartas, arroz con leche...

Concejo de Belmonte de Miranda

Oro y tierra, sierras, montañas y valles salen al paso del Pigüeña. Astures, romanos, vaqueiros, así es Belmonte de Miranda, tierra de paso, de pastos y de mestizaje.

Los concejos (municipios) que limitan con el Concejo de Belmonte de Miranda son: Grado, Salas, Somiedo, Teverga y Tineo. Cada uno de estos concejos (municipios) comparte fronteras geográficas con Belmonte de Miranda, lo que implica que comparten límites territoriales y pueden tener interacciones políticas, sociales y económicas entre ellos.

Comarca del Camín Real de la Mesa

Fue el sueño de un Imperio, el romano, que ambicionaba las riquezas de la tierra y la bondad de sus gentes; es cruce de caminos —el de la Mesa, el de Santiago y la Senda del Oso—. Es el hogar de los osos pardos y Reserva de la Biosfera —la de las Ubiñas-La Mesa—.

La comarca está conformada por uno o varios concejos (municipios). En este caso: Belmonte de Miranda, Candamo, Grado, Las Regueras, Proaza, Quirós, Santo Adriano, Somiedo, Teverga y Yernes y Tameza. Los concejos representan las divisiones administrativas dentro de la comarca y son responsables de la gestión de los asuntos locales en cada municipio.

Conocer Asturias

«Bufones de Pría: Ubicados en la costa oriental de Asturias, los bufones de Pría son formaciones geológicas impresionantes. Son chimeneas naturales creadas por la erosión del mar en los acantilados de piedra caliza. Cuando las olas del mar chocan contra estas chimeneas, el agua es expulsada violentamente, creando espectaculares chorros de agua y sonidos estruendosos.»

Resumen

Clasificación: Dónde dormir

Clase: Alojamientos turísticos

Tipo: Hoteles

Registro de Empresas y Actividades Turisticas: H-2053-AS

Comunidad autónoma: Principado de Asturias

Provincia: Asturias

Zona: Occidente de Asturias

Situación: Montaña de Asturias

Comarca: Comarca del Camín Real de la Mesa

Municipio: Belmonte de Miranda

Parroquia: Belmonte

Entidad: Belmonte

Web del municipio: Belmonte de Miranda

E-mail: Oficina de turismo

E-mail: Ayuntamiento de Belmonte de Miranda

Dirección

Dirección postal: 33830 › Travesía La Veiga • Belmonte › Belmonte de Miranda › Principado de Asturias.
Dirección digital: Pulsa aquí



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